La Asociación Nacional de Empresas de Sanidad Ambiental (Anecpla) ha advertido sobre la aparición de las chinches de cama en verano. Estos insectos, de entre 5 y 6 milímetros, pueden resultar un incordio dentro de la vivienda. El organismo destaca de estos parásitos que son “una plaga muy asociada al sector hotelero y a las viviendas turísticas”.
Las chinches anidan en camas, sábanas, muebles y sillones. Estos insectos se alimentan de la sangre humana a través de su picadura. Esto puede generar reacciones alérgicas, estrés, molestias e insomnio en la persona afectada. El director de Anecpla, Jorge Galván, ha explicado que estos parásitos ejercen “de polizones entre la ropa o la maleta”.
Esta migración de las chinches provoca “nuevas infestaciones en hogares, hoteles, apartamentos, etc.”. Según la asociación, se creía que la presencia de estos insectos era debido a la suciedad, pero no parece el caso. “La globalización, los mayores niveles de contaminación y el aumento de las temperaturas debido al cambio climático están detrás de este resurgimiento de las chinches en Europa”, explica su dirigente.
“La reactivación del turismo, unos niveles de contaminación ambiental disparados y unas temperaturas sofocantes como las que venimos sufriendo sin ir más lejos las últimas semanas, sumado a la extraordinaria velocidad de proliferación de esta especie ha provocado que, en los últimos años, la población de chinches se haya incrementado en más de un 500%”, destaca Galván