La selección española firmó su sexta clasificación a las semifinales de una Eurocopa, derrotando por primera vez en su historia al país anfitrión y con buenos recuerdos del partido previo a la gran final, superándolo en cuatro de las cinco ocasiones que las disputó.
La gesta se celebró a lo grande por parte de los jugadores de España en el estadio de Stuttgart, aunque la fiesta dejó sobre todo una imagen con toda la plantilla en el vestuario… ¡con Pedri con la rodilla vendada delante de todos sus compañeros!
El centrocampista del Barça, que tuvo que abandonar el terreno de juego a los seis minutos por una durísima entrada de Toni Kroos, sufre un esguince que podría hacer que se pierda tanto las semifinales como la final de la Eurocopa.
“El grupo es lo más importante. Esperemos que lo de Pedri sea solo un golpe, porque es importantísimo. Esta victoria es para él”, comentó Dani Olmo tras la victoria y recibir el MVP del partido gracias a su gol y su asistencia. Una declaración que deja muy claro el espíritu de la selección española, que antepone el concepto de familia a las individualidades.
Preocupación en España
La euforia de la clasificación, sin embargo, empezó a convertirse en realidad en la salida de los jugadores de vestuarios tras pasar por la ducha. El caso más preocupante fue el del mismo Pedri, que abandonó el estadio cogeando sin decir ninguna palabra como muestra este vídeo de Jordi Gil, enviado especial de SPORT:
Minutos más tarde, Gündogan y Ferran, compañeros en el FC Barcelona, intercambiaron unas breves palabras en las que se pudo ver al alemán preocupándose por la situación del canario, a lo que el extremo respondió que mañana tendrían más inputs sobre la gravedad de la lesión del centrocampista.