A 24 horas de que la Conferencia Sectorial sobre inmigración se celebre en Tenerife con la presencia de todas las CCAA y el Gobierno central para abordar el reparto de menores migrantes no acompañados en las islas hacia otros territorios -casi 6.000 adolescentes y niños están pendientes de ser derivados- y una reforma en la Ley de Extranjería para agilizar las futuras derivaciones, Vox insiste en presionar al PP para que se oponga a la acogida de los menores en los territorios donde gobiernan en coalición.
Esta vez lo han hecho a través de una Proposición No de Ley (PNL), que tiene mucho de brindis al sol pero que también introduce una nueva tensión entre los dos socios. Las PNL son iniciativas parlamentarias que instan al Gobierno a actuar en un sentido. Es decir, no son vinculantes en ningún caso. Además, teniendo en cuenta que se registra en el mes de julio, el debate no llegará hasta que arranque el nuevo curso tras el verano.
Pero Vox lo registra en este momento para reforzar su postura. La misma que ayer dejó clara Santiago Abascal, pasando a una amenaza clara al PP: si las comunidades que gobiernan juntos aceptan la derivación de menores migrantes no acompañados de Canarias, los gobiernos “se darán por rotos”.
La iniciativa de Vox, presentada por su portavoz parlamentaria, Pepa Millán, pide en su primer apartado “acometer las medidas oportunas para que se revoque la propuesta de reparto de los menores extranjeros promovida en el marco de la conferencia sectorial del 18 de julio”. La referencia es a la reunión que finalmente tendrá mañana, ya que se adelantó para el 11 de julio.
En todo caso, Vox pretende así mantener viva su postura y retratar al PP, al que ya advirtió que deberá “utilizar todos los medios políticos y legales a su alcance” para intentar que el reparto no se produzca. El partido de Abascal consideraría entonces que los conservadores deben apoyar esta iniciativa, que además pide abiertamente “tramitar de forma preferente e inmediata la expulsión de todos los inmigrantes que accedan ilegalmente a nuestra nación, así como la de aquellos inmigrantes legales que cometan delitos graves o hagan del delito leve su forma de vida”.
Abascal lleva tiempo acusando al PP de haberse alineado con el PSOE después de que hace dos meses los dos grandes partidos votaran a favor de una iniciativa legislativa popular que regulariza a 500.000 inmigrantes ilegales que residían en España.