España es el segundo país con mayor prevalencia de diabetes en Europa, según los datos de la Sociedad Española de Diabetes (SED). En los últimos años, se ha producido un “fuerte” aumento del número de adultos españoles con diabetes, hasta alcanzar una prevalencia del 14,8% (más de 5 millones). Pero, lo más preocupante de esta enfermedad es el infradiagnóstico: casi un tercio de las personas no están diagnosticados.
Y, como explica a ‘Guías de Salud’ el doctor Franz Martín Bermudo, catedrático de Nutrición de la Universidad Pablo de Olavide-CIBERDEM, que acaba de publicar Vivir con diabetes (Vergara):
- “Con este ritmo de crecimiento de nuevos casos de diabetes tipo 2 (que se puede prevenir en muchos casos) hemos alcanzado ya las previsiones de la Organización Mundial de la Salud para 2030”.
Y el problema es que, cuando no se detecta o no se trata adecuadamente, puede causar complicaciones graves y potencialmente mortales. Por ejemplo:
- Un infarto de miocardio
- Un accidente cerebrovascular
- Una insuficiencia renal
- Una ceguera
- La amputación de miembros inferiores…
Y todas ellas reducen la calidad de vida y aumentan los costes sanitarios”.
Diferencia entre diabetes tipo 1 y tipo 2
La diabetes mellitus tipo 2 es una enfermedad crónica, diez veces más frecuente que la del tipo 1 (enfermedad autoinmune, que se diagnostica con mayor frecuencia en niños y adolescentes). Es una afección grave que se caracteriza por una resistencia a la insulina. Es decir, la insulina que produce el páncreas no funciona de forma correcta o no se produce la cantidad suficiente para permitir que la glucosa pase de la sangre a las células y se convierta en energía.
Prevención de la diabetes: consejos para evitar la enfermedad
El doctor Martín Bermudo hace hincapié en cómo un estilo de vida saludable “puede ayudar a prevenir la aparición de la diabetes tipo 2, que es la forma más común de esta enfermedad”. Aunque la gente “cada vez tiene más información de lo que tiene que hacer, la prevalencia de la diabetes sigue creciendo a un ritmo imparable”.
La diabetes tipo 1 no puede prevenirse, pero hay medidas que podemos adoptar para reducir el riesgo de desarrollar diabetes tipo 2. De hecho, las investigaciones clínicas han demostrado que el riesgo de desarrollar diabetes se reduce en más de un 50 % al realizar cambios relativamente sencillos en el estilo de vida.
No obstante, también es importante un diagnóstico temprano y el acceso a un seguimiento adecuado para retrasar las posibles complicaciones.
- Dieta saludable. Es recomendable seguir una alimentación completa que aporte todos los nutrientes que nuestro organismo necesita: hidratos de carbono, grasas, proteínas, vitaminas, minerales y agua. Eso sí, de calidad. Hay que evitar todos los alimentos con azúcares añadidos, precocinados, bollería, zumos y refrescos. Y dar más importancia al consumo de cereales integrales, legumbres, vegetales y frutas.
- Aumentar la actividad física. Cada paciente debe adaptarlo a sus condiciones personales, pero la OMS recomienda 150 minutos semanales en sesiones de 3 a 5 veces con una actividad aeróbica: andar, nadar, montar en bici… El especialista recalca que no se debe hacer o reanudar el ejercicio si los niveles de glucosa están por debajo de 100 mg/dl o por encima de 200 mg/dl.
- Mantener un peso corporal adecuado.
Factores de riesgo para la diabetes tipo 1 y tipo 2
- Antecedentes familiares. Si tu padre o hermano tiene diabetes tipo 1, se tiene mayor riesgo de desarrollar esta enfermedad.
- Edad. La diabetes tipo 1 es más común en niños y adolescentes.
En el caso de la diabetes tipo 2:
- Prediabetes.
- Obesidad.
- Físicamente inactivo.
- Más de 45 años.
- Síndrome de Ovario Poliquístico (SOP).
Cómo detectar la diabetes tipo 2
El experto señala que muchas personas son diagnosticadas de diabetes tipo 2 después de un análisis de sangre rutinario, aunque produce algunos síntomas que pueden evidenciar la presencia de esta enfermedad crónica.
Diabetes, ¿más cerca de la curación?
El doctor Franz Martín Bermudo es uno de los referentes en Europa en la investigación y la divulgación acerca de la diabetes. Su experiencia y su rigor son la base para ayudarnos a entenderla mejor y combatirla adecuadamente. Pero, ante la pregunta de si estamos a un paso de la curación definitiva:
- “En las enfermedades crónicas el concepto de curación es diferente”, explica.
“Podemos abordar la curación entendiendo que soy una persona que tengo diabetes, no me quitan la causa que produce la enfermedad, pero hago una vida normal como si no la tuviera, Y eso podría entenderse como curación. O se consigue eliminar la enfermedad, que es diferente”. Pero, el especialista es “positivo porque la tecnología está avanzando mucho, con nuevos fármacos e insulinas que están apareciendo”.