La revista ‘Novosti’ enfrentó durante años las agresiones y el acoso de la extrema derecha en Croacia. Pero, aún así, ninguna de esas presiones detuvo nunca la actividad de este semanario editado por el Consejo Nacional serbio (SNC) y considerado una referencia en el país por sus artículos de opinión y sus reportajes de investigación. Pero ahora eso podría cambiar. En sus negociaciones para formar Gobierno con el conservador Unión Democrática Croata (HDZ), el ultraderechista y euroescéptico Movimiento por la Patria (DP) ha puesto como condición suspender la financiación pública que recibe ‘Novosti’. Finalmente, HDZ y DP han alcanzado un acuerdo.
“Lo que puede pasar es que tengamos que cerrar”, afirma Andrea Radak, directora de la revista. “De momento, están los fondos para este año pero DP ya ha adelantado que, si ‘Novosti’ no cierra, el año que viene no votarán los Presupuestos (lo que podría provocar una crisis de Gobierno)”, cuenta. “Es un ataque claramente motivado por nuestro periodismo de investigación, así como por el hecho de que somos un medio de comunicación de la minoría serbia y que los periodistas de ‘Novosti’, independientemente de su origen étnico, se resisten a las tendencias revisionistas de la sociedad”, añade.
De hecho, ‘Novosti’, al igual que otros medios de minorías que habitan en Croacia, recibe financiación pública del Consejo para las Minorías Nacionales, como parte de una serie de normas que se establecieron al final de la terrible guerra fratricida de los 90 del siglo pasado, para permitir una mejor integración y coexistencia entre los distintos grupos que existen en el país. Pero eso es precisamente lo que al parecer molesta. “Es lo que está previsto por la Constitución, por lo que si las demandas de DP son aceptadas, eso sería una grave violación de la ley y de la Carta Magna”, afirma Maja Sever, periodista de la televisión pública croata (HRT) y presidenta de la Federación Europea de Periodistas (FEP).
Croatizar a la prensa
Con ello, tanto la FEP como la Asociación de Periodistas de Croacia, han salido en tromba a defender a ‘Novosti’ en las últimas semanas. “El asunto es que ‘Novosti’ no es solo un medio que representa a una minoría, sino es el medio en el que escriben algunos de los periodistas más prestigiosos del país y a lo largo de los años ha llevado adelante importantes investigaciones sobre el discurso del odio, la corrupción y la extrema derecha croata, por lo que sería un golpe terrible para todo el sector en Croacia”, añade Sever, en una entrevista con este diario.
La seriedad de la amenaza radica en efecto en que, si bien no es la primera vez que ‘Novosti’ está en la mira y es acusada de ser “antipatriótica”, ahora la extrema derecha forma parte del Gobierno nacional. “En su propio programa electoral, DP afirma que trabajará para ‘croatizar’ a los medios croatas. No sabemos bien qué significa esto pero no suena muy bien”, subraya Sever, al expresar también preocupación por el silencio que, dice, mantiene HDZ, partido de centroderecha que lleva tiempo en el poder en Croacia pero que en las últimas elecciones tuvo que pactar con DP al no haber alcanzado una mayoría suficiente para gobernar en solitario. “Están jugando un juego peligroso“, dice la periodista.
Más aún porque al hostigamiento del Movimiento por la Patria se han sumado también una ola de amenazas contra los periodistas de ‘Novosti’ desde abril por mail, cartas, teléfono y redes sociales, algunas incluso de muerte o con referencias a los ‘ustasha’, los aliados croatas de los nazis durante la Segunda Guerra Mundial. Y todo esto cuando el hoy líder de DP es Ivan Penava, un exmiembro de HDZ y alcalde de Vukovar (una de las ciudades más conflictivas del país por sus tensiones étnicas), que ya en el pasado ha repetidamente negado el estatus del serbio como idioma cooficial (también en zonas donde los serbios son más del 30%) y ha defendido eslóganes ‘ustasha’.
Críticas internacionales
Tanto es así que incluso el Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ, por sus siglas en inglés), una organización independiente que promueve la libertad de prensa en el mundo, ha pedido a las autoridades croatas poner en marcha una investigación. “Las autoridades croatas deben investigar las docenas de amenazas recibidas por los periodistas de ‘Novosti’, responsabilizar a sus culpables y garantizar la seguridad de los reporteros del medio”, ha dicho Attila Mons, representante de CPJ para Europa.
Otros han alertado sobre las presiones que también otros medios independientes reciben en Croacia, un país en el que, según Reporteros Sin Fronteras (RSF), “el Gobierno en sí es una amenaza para la libertad de prensa”. “Trabajar como periodista en Croacia puede ser peligroso. Los reporteros que investigan la corrupción, el crimen organizado o los crímenes de guerra, especialmente a nivel local, a menudo son víctimas de campañas de acoso. Las agresiones físicas, las amenazas y la violencia cibernética representan un problema importante con poca respuesta por parte de las autoridades”, ha escrito RSF, en sus últimos análisis sobre la situación de la prensa en el país.