La consejera de Bienestar Social de Castilla-La Mancha, Bárbara García Torijano, ha manifestado la “plena colaboración con la situación que se está viviendo” desde la región con los menores refugiados en Canarias, señalando que “tiene que ser un problema que se tiene que asumir, por supuesto, por parte del Gobierno de España en colaboración con las comunidades autónomas”, por lo que la administración regional va “a votar a favor de la acogida de los menores”.
En declaraciones a los medios de comunicación previos a su participación en la Conferencia Sectorial de Infancia y Adolescencia con comunidades autónomas, celebrada en Santa Cruz de Tenerife, en la que se aborda la reforma de la Ley de Extranjería para el reparto de menores migrantes no acompañados.
La consejera ha recordado que Castilla-La Mancha ha ofrecido su colaboración desde hace años para dar una salida al problema. “No es el primer año que acogemos a menores de Canarias”, ha manifestado en este sentido.
“Es importante conocer la realidad, la realidad que se vive, porque, además, también es importante trabajar en un proyecto no solamente del presente, con una situación de emergencia ya estructural que se está dando aquí en Canarias, sino trabajar a futuro”, ha señalado Torijano. “Hay que intentar ir a la raíz de la situación y hay que intentar entre todos buscar posibles soluciones para que lo que hemos visto hoy en el centro no se siga llevando a cabo”, ha añadido.
Con respecto a la reforma de la reforma de la Ley de Acogida, se ha mostrado a favor de modificar la ley “para poder dar cobertura y, por tanto, para poder garantizar que los derechos de los niños y niñas que están aquí en Canarias se cumplan y se les pueda tener bien atendidos y, por supuesto, con todas las garantías que se merecen”.
Asimismo, ha destacado que en el borrado de la Ley que se les ha proporcionado se recoge “una financiación para poder llevar a cabo esta modificación, lo cual es importante porque las comunidades autónomas tenemos un sistema de protección que no queremos que tampoco se vea debilitado y, por tanto, tenemos que garantizar que tanto nuestro sistema de protección”.
Según la propuesta del Gobierno de España, Castilla-La Mancha acogería a 20 niños del cupo a repartir de 347.