Después de dos carreras muy difíciles en Barcelona y Austria, Fernando Alonso regresó a la zona de puntos en el Gran Premio de Gran Bretaña, al concluir octavo, por detrás de su compañero, Lance Stroll, que se vio beneficiado al hacer su primera parada en boxes. Un resultado que dejó un sabor agridulce al asturiano, que hizo autocrítica en cuanto a su gestión de la carrera y reconoció que su apuesta de aguantar una vuelta más en pista antes de poner intermedios con lluvia acabó siendo errónea.

Source link