El 7 de julio de 2014 falleció Alfredo di Stéfano a los 88 años de edad. Uno de los mejores futbolistas de la historia, ganador de dos Balones de Oro en 1957 y 1959 como futbolista del Real Madrid, entidad de la cual fue presidente honorífico desde el 2000 hasta su fallecimiento. El delantero argentino, sin embargo, que quería poner rumbo a Europa, tenía cerrado su traspaso con el Barça; pero el Real Madrid y el régimen franquista lo impidieron.
El Barça había alcanzado un acuerdo con el futbolista y River Plate en 1953 para fichar al argentino por cuatro millones de pesetas al contado. El Real Madrid llegó tarde para firmarle y optó por comprar los ‘falsos’ derechos del jugador con Millonarios de Bogotá (Colombia no formaba parte de la FIFA), equipo donde militaba el delantero, tras haberse escapado de Argentina. El argentino, sin embargo, se desplazó hasta Barcelona con su familia para enrolarse en el club azulgrana, pero la Federación Española y el régimen pusieron en marcha la maquinaria y orquestaron una operación para que no se llevase a cabo. Había que impedir por tierra, mar y aire que se juntasen Kubala y Di Stéfano en el mismo equipo.
El caso llegó a altas instancias y se acordó que Di Stéfano jugase en años alternos en Barça y Madrid –siendo el primero de ellos para el cuadro blanco-. Una medida rocambolesca de pies a cabeza de la que ni el propio Di Stéfano estaba de acuerdo. El entonces presidente del FC Barcelona, Enric Martí Carreto, tras haber dado luz verde al pacto y recibir múltiples críticas, presentó su dimisión y el Barça recuperó la inversión realizada, eso sí, a plazos, según indica Luque.
El argentino hizo historia con el Real Madrid, elevó al club blanco a otra dimensión y le condujo a ganar seis Copas de Europa, cinco de las cuales de manera consecutiva; mientras que el Barça apostó por no participar en esta competición privada y sí hacerlo en la oficial: la Copa de Ferias, que alzó tres veces.