Las caídas entre la población mayor son muy frecuentes. El sedentarismo, la inestabilidad y los medicamentos para tratar el insomnio, la ansiedad o la hipertensión, son algunos de los factores que pueden hacer más propensas a las personas mayores a caerse y sufrir lesiones.
Lesiones que se agravan si, además de todos estos factores, esa persona sufre deterioro e su salud como pérdida de masa muscular, ósea u osteoporosis.
Como subraya el doctor Francisco Baixauli García, secretario general de la Sociedad Española de Cirugía Ortopédica y Traumatología (SECOT):
- Entre el 30% y el 50% de las caídas desencadenan en una fractura y “estas fracturas en ancianos con osteoporosis conllevan altas tasas de morbimortalidad, dependencia y discapacidad”,
¿Qué fracturas son más habituales en las personas mayores?
Las complicaciones de estas caídas no siempre son las mismas, sino que están directamente relacionadas con la zona que se rompe. El especialista en traumatología señala que las localizaciones más habituales de las fracturas que sufren las personas de más edad son:
- El radio distal, es decir, la muñeca.
- La cadera.
- El hombro (húmero proximal)
- La pelvis.
- La columna vertebral.
Y la que tiene más riesgo de complicaciones es la rotura de la cadera, cuyo porcentaje de mortalidad se sitúa entre el 15% y 30%.
Como la mayoría de estas fracturas se producen en personas mayores, y con más frecuencia cuando se va envejeciendo:
- “La recuperación cada vez será más lenta y puede provocar incluso secuelas como el aumento de la dependencia funcional al disminuir la autonomía de la marcha de los pacientes, requiriendo ayudas para la deambulación, sobre todo, cuando la fractura tiene lugar en las caderas”, señala el especialista.
Avances en el tratamiento de la osteoporosis
La presencia de la osteoporosis marca una importante diferencia en cuanto al curso que puede tomar una caída. Afortunadamente, la situación de esta patología ha cambiado mucho en los últimos años.
- Por un lado, cada vez hay una mayor concienciación tanto de la población en general como de los profesionales sanitarios sobre la necesidad de un diagnóstico precoz de la osteoporosis, así como de instaurar un tratamiento preventivo tanto farmacológico como no farmacológico (nutrición adecuada, actividad física regular y hábitos de vida saludables).
- Por otro, está la aparición de nuevos fármacos y la manera de instaurarlos (terapia secuencial).
Además, han aparecido sistemas de osteosíntesis que facilitan la fijación y la estabilización de estas fracturas que presentan una mala calidad ósea, como son las osteosíntesis percutáneas, que consisten en la utilización de placas con tornillos bloqueados, que actúan a modo de fijador interno, en vez de los clásicos tornillos a compresión.
La importancia de la prevención
A pesar de todos estos avances, los especialistas en traumatología siguen insistiendo en la necesidad de incrementar la prevención.
El doctor Baixauli subraya que es fundamental someterse a chequeos para detectar:
- Deficiencias en la dieta
- Problemas óseos o de salud que puedan aumentar el riesgo de fracturas y lesiones.
Como advierte el especialista:
- “El deterioro cognitivo y la falta de agudeza visual y/o auditiva son factores de riesgo de caídas en ancianos y deben por tanto diagnosticarse precozmente”
- “Una buena salud ósea, muscular y articular depende de un estilo de vida saludable en todas las etapas de la vida junto con una dieta equilibrada, ejercicio regular, peso adecuado, entornos seguros y evitar hábitos nocivos como fumar y beber en exceso”.
- “Las revisiones médicas periódicas ponen de manifiesto problemas de salud y riesgo de fracturas para tener un envejecimiento activo y saludable con máxima autonomía e independencia funcional”.
Especial atención a las caídas reiteradas
Además es muy importante estar atentos a aquellos pacientes que sufren caídas de forma reiterada.
El doctor José Ramón Caeiro Rey, jefe de Servicio de Cirugía Ortopédica y Traumatología en el Complejo Hospitalario Universitario de Santiago, señala que este tipo de pacientes presentan ‘riesgo inminente de fractura’ a corto plazo.
- “Este tipo de pacientes que presenta caídas frecuentes y ha sufrido al menos una fractura osteoporótica previa presenta un elevado riesgo de sufrir una nueva fractura en menos de un año desde la primera”.
“Es esencial una rápida acción diagnóstica y terapéutica disminuyendo los factores de riesgo modificables, sobre todo las nuevas caídas, y utilizar fármacos altamente eficaces en la prevención secundaria de nuevas fracturas (fármacos antirresortivos u osteoanabólicos por vía parenteral)”, afirma este especialista.